Nuevos avances en la investigación del incendio que consumió el escenario principal de Tomorrowland el pasado julio señalan un posible origen: pruebas con grandes bowls de fuego utilizados durante ensayos previos al festival. De acuerdo con VRT NWS, el siniestro habría comenzado como una pequeña ignición dentro de un cuenco decorativo, que posteriormente se propagó hasta destruir por completo la estructura valorada en cerca de 60 millones de euros.
La pista principal apunta a unas pruebas que implicaban al menos cuatro fire bowls de dos metros de diámetro, diseñadas para generar columnas de fuego sobre el escenario. Cámaras de seguridad habrían registrado el primer estallido antes de que el fuego viajara a la construcción del escenario, compuesta mayormente por madera y poliestireno, materiales que pudieron acelerar el desastre.
Ensayos pirotécnicos previos al festival
Uno de los bowls prende fuego inesperadamente
Llamas alcanzan la escenografía principal
El fuego se expande rápidamente por la estructura
Además, se descubrió que había fuegos artificiales almacenados en la zona, lo que pudo intensificar la propagación.
Una revisión al permiso municipal revela posibles inconsistencias:
Los fuegos artificiales se habrían colocado en el lugar antes de lo autorizado
El permiso prohibía expresamente ese tipo de almacenamiento
Se reporta presencia de personal no autorizado durante las pruebas
La comunicación con autoridades federales habría sido insuficiente
Tomorrowland no ha dado declaraciones sobre la causa exacta del incendio, insistiendo en que el proceso legal sigue en curso. Toda la grabación de cámaras fue entregada a la fiscalía.
El alcalde de Boom, Jeroen Baert, expresó molestia ante la poca claridad de información: “No se me ha informado oficialmente, no puedo evaluar si estos reportes son exactos”.
La investigación avanza en vías penales y civiles, por lo que la causa final aún está en evaluación.
Seguiremos informando en cuanto surjan nuevos datos.